El gobierno nacional, con el nuevo curriculo educativo pretende imponer su modelo económico socialista, que podría empezar a imponerse en aquellos alumnos de cuarto grado, hasta toda la educación media.
La propuesta oficial de rediseño de la educación le concede 37 contenidos a la producción social. "Todo el currículo tiene una concepción endógena, porque hace énfasis en lo local y regional.

Desde cuarto grado se propone estudiar la importancia que le ha dado el Gobierno y, en secundaria, se plantea como una de las 6 áreas del conocimiento. A ella se le dedican cuatro horas semanales, en total, en todo el bachillerato, 20 horas semanales, si el joven opta por la mención Ciencias Sociales, que actualmente es Humanidades, o 19 horas si elige Ciencias Naturales, que corresponde en estos momentos a Ciencias.

El término se menciona en 66 oportunidades dentro el programa educativo de la secundaria y su intención es que las instituciones formen "en, por y para el trabajo productivo liberador" a unos egresados comprometidos con su entorno, y capaces de solucionar problemas de su comunidad, a través de proyectos de desarrollo endógeno.

El currículo refiere que en los liceos habrá laboratorios dedicados a esta área de trabajo –aunque no menciona los de física, química y biología–, así como desarrolla sus contenidos en otras áreas del conocimiento: En primer año se estudia en las horas dedicadas a ambiente; al tiempo que en segundo, tercero y quinto está también en sociales, relacionado con temas como el ahorro, el petróleo y las selvas.

Además, durante todo el bachillerato, se visitarán sitios de desarrollo endógeno en las horas de Educación Física.

OPINAN LOS EXPERTOS:
Eduardo García, quien pertenece al Centro de Investigación y Formación Humanista de la UCAB e imparte clases en la Escuela de Educación de esa casa de estudios, califica de exageración el hecho de que haya 37 contenidos de desarrollo endógeno en el bachillerato.

Deja claro que no rechaza el tema, pues considera que en países como España e Italia ha contribuido con el progreso de muchas localidades, pero insiste en que no debe ser el único sistema productivo, como lo refleja el currículo.

Propone que éste se trabaje como un eje transversal y no como un área, para evitar las repeticiones de contenidos al tiempo que se promueva el desarrollo comunitario: "Es una idea interesante, pero si se insiste en que el desarrollo endógeno y la propiedad colectiva es lo único, hacen más acento en lo ideológico que en lo productivo. El asunto es centrarnos en lo importante de lo comunitario y no en promover un modelo político marxista leninista".

¿Qué profesores darán esa materia? ¿Qué estudiarán en ella los jóvenes de colegios en zonas urbanas y con pocas necesidades? Son preguntas que se han hecho los educadores que han asistido a los cursos del ME. García asegura que las instituciones de clase alta igual pueden enseñar a sus alumnos a ser productivos, como actualmente se hace en Educación para el trabajo. "Va a ser más difícil para alguien del Alto Hatillo, pero me parece muy bien que la escuela fomente la importancia de la producción en todos los estratos. Lo malo es la cantidad de horas que se le dedican", explica.